Cuando lo natural se esconde detrás de lo construido, ¿Sigues viendo lo que es real?
Esta serie es una exploración visual de la frontera entre el mundo interior y el exterior, donde lo que parece estático y cotidiano se convierte en un portal hacia lo íntimo, lo escondido, lo conceptual. A través de estas imágenes, invito al espectador a cruzar esas puertas invisibles que conectan nuestras percepciones externas con nuestras emociones y pensamientos más profundos.
Cada imagen es un reflejo de mi propia búsqueda interna, en la que después de experimentar me doy cuenta que la busqueda de la vida no es hacia factores externos, sino, hacia el interior. Es por eso que juego con portales obstruidos que reflejen los bloqueos mentales que los humanos para distraernos de nuestra propia verdad. 
Este trabajo es una invitación a detenerse y a observar, a reflexionar sobre cómo lo que está afuera puede ser un reflejo de lo que llevamos dentro. 
Esta instalación 360 ayuda a que el espectador perciba que los problemas se tratan desde distintos puntos de vista. No hay una sola manera para ver la vida. Lo bello es poder abordarla desde diferentes aristas para aprender. 
Registro de obra en la exposición colectiva Primeras Impresiones 2024.
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